LA VERDADERA RAZÓN POR LA QUE NO PUEDES DEJAR DE COMER QUESO.
¿Eres de esas personas que has intentado dejar el queso y no puedes?. Para mí como vegana fue de las cosas mas difíciles de dejar, y no entendía por qué. Hoy voy a explicártelo.
No se si recuerdas las cara de tu bebe cuando le dabas el pecho. Yo si la recuerdo. Yo le di hasta los 6 años. Y lo mas increíble es que ella también lo recuerda. Muchas veces me dice mamá, que buena estaba esa leche.
Y eso que todos tenemos una sensación de que la leche materna debe ser agria y mala. A mi nunca se me ocurrió probarla. Ahora resulta que esta dulcecita.
Pues bien, después de 6 años de amamantar a mi hija y recordar esa cara de placer que ponía y hacer ese chiste malo .- Mira, mira le sube le sube… francamente creía que era de puro amor. Nunca imaginé la realidad.
Efectivamente la cara de gusto que ponía mi hija era de subidón. Exactamente igual que si le hubiese dado una pastilla de extasis. Y es que la leche materna tiene un elemento adictivo que activa la serotonina y genera placer. Un placer inmenso.
Y te preguntarás para que la Naturaleza coloca a tu hijo cada vez que lo alimentas? Muy fácil la respuesta, para que coma más y crezca mejor.
Mamás!, por si no os ha quedado claro, la cara de gusto de tu bebe cuando mama es que está literalmente colocado.
Pues bien, ¿qué pasa con esa hormona de placer que se activa cuando tomas la leche que le corresponde a un ternero? Pues que también sientes ese placer. La leche de vaca activa ese centro de felicidad y esa es la razón por la que no puedes parar de tomar queso cuando eres adulto.
Y ahora te preguntarás que tiene que ver contigo….Pues mucho.
La adicción a los lácteos, en especial al queso está vinculado a múltiples enfermedades crónicas como son:
Acné, sobrepeso, obesidad, síndrome poliquístico, impotencia, dolores menstruales, molestias de la menopausia, diabetes hipo e hipertiroidismo, endometriosis, cáncer, problemas en la piel y pelo, infertilidad, cambios de humor e incluso depresión.
Por otro lado la industria láctea se ha encargado durante décadas de asociar la leche al calcio. Error.
El mejor calcio no es ni mucho menos el de la leche.
El mejor calcio es el de absorción lenta como por ejemplo el del brocoli, kale, soja, semillas (sésamo) , espinacas, berros, almendras, judías verdes….
Consumirlo añadido en leches vegetales puede llegar a descalcificarte. El organismo se protege del exceso de calcio eliminándolo. Por ello hay que consumirlo de forma natural.
Estudios revelan que personas que beben mucha leche pueden sufrir osteoporosis, además de otras patologías comunes.
Hiromi Shinya, famoso doctor creador de la colonoscopia, hizo un estudio durante 30 años investigando las diferentes enfermedades de los japoneses tras la segunda guerra mundial que fue cuando los USA, proporcionaron leche gratuita a los niños. Crearon hábitos occidentales con fines comerciales. El resultado de esa campaña es que ahora los japos sufren de sobrepeso además de otras patologías crónicas.
Los asiáticos nunca tomaron lácteos antes de occidentalizarse. Ahora tienen que lidiar con un montón de enfermedades conocidas por todos nosotros y que se deben nuestro estilo de vida.
QUE TIENE DE MALO LA LECHE
Razón nº 1 La leche de vaca la fabrica la vaca para su ternero para que crezca. Para ello además de mucha grasa tiene otros componentes que no necesitamos. Si ya hemos crecido, ¿Qué sentido tiene?
Somos la única especie de que toma leche de adulto y además de otra.
¿No es ridículo?
Razón nº 2 Es una crueldad.
La madres vacas lecheras pasan toda su vida preñadas. Las inseminan artificialmente cada año.
Has estado embarazada alguna vez? Se pasa bastante mal. Pero si te quitan tu bebe mucho peor. Se lo llevan. Ellas corren detrás ….su instinto es cuidar a su bebe.… ¿No te parece cruel?
Razón nº 3 Para embarazarlas y que produzcan mucha leche continuamente las atiborran a hormonas en concreto estrógenos. Y sabes quién se come esas hormonas? Pues tu.
Los desarreglos hormonales tienen mucho que ver con la leche que tomas por la cantidad de estrógenos.
Razón nº4 Además de hormonas, las hinchan a antibióticos. Adivina quién se los toma…. pues tu.
La resistencia generalizada a los antibióticos, tiene mucho que ver con el consumo generalizado de leche.
Las vacas viven hacinadas entre orín, heces, por lo que tienen que estar repletas de antibióticos con el fin de prevenir infecciones.
Todo esos antibióticos no solo pasan a tu sangre, cuando tu orinas pasan a las aguas fecales y de ahí al mar. Parece mentira, pero el hecho de medicar a las vacas tienen consecuencias mucho mas graves de lo que lo que pensabas.
Razón nº 5
La impotencia masculina está directamente vinculada al consumo de proteínas de origen animal y al colesterol.
El exceso de grasa mala implica un mal funcionamiento arterial. Las grasas saturadas y las trans provocan que aumente tu nivel de colesterol en sangre. la consecuencia es que tus arterias no dilatan lo suficiente. La impotencia es el aviso de que tu sistema cardiovascular falla. Señores! en vez de tomar la famosa pastilla azul, quizás deberían de preocuparse que es lo que comen. Reducir las grasas saturadas y trans es la única vía para recuperar la vitalidad sexual.
Razón nº 6
El suelo se empobrece. Y con ello la riqueza de nuestros alimentos vegetales.
Si una vaca esta libre, su caca que procede del propio pasto, abona el suelo. Así el suelo es rico en nutrientes. El ciclo de la vida funciona perfectamente. Si rompes ese ciclo, te cargas la Naturaleza.
Razón nº 7. Los gases emitidos por vacas que comen pienso son muy superiores a la contaminación de todos los vehículos del mundo. Es decir:
Las vacas de la ganadería intensiva, contaminan mas con sus gases que el CO2 emitido por los coches.
La razón es que los piensos no es su alimento natural, y emiten gases contaminantes. Como la ganadería extensiva es tan inmensa, la cantidad de CO2 que emiten es mas abundante.
Razón nº 8.
El queso es un 70% de grasa y nada de fibra. La grasa es donde se concentran las toxinas en general.
La grasa produce hormonas como lo estrógenos que multiplican el crecimiento celular. A mas grasa, mas estrógenos mas posibilidades de contraer cáncer. Equilibrar tu peso no es una cuestión estética. Es una necesidad por salud. Como dice Shinja es leche podrida. Y como es adictivo es responsable de una población con sobrepeso. Además es en la grasa donde crecen mas a gusto las células cancerosas.
Razón nº 9.
El cáncer, especialmente el de mama está directamente relacionado con el consumo de lácteos.
La leche es un alimento preparado para que un bebé crezca y engorde rápidamente. Las hormonas que contiene así como los nutrientes son específicos para cada especie. Consumir un exceso de nutrientes fomenta el crecimiento tumoral. Estas estimulando un sistema que no necesitas ya. La relación entre la hormona IGF-1 (hormona de crecimiento insulínico) y el cancer de mama y de próstata están de sobra documentados. La prueba mas gráfica es que en los países asiáticos cuando no consumían lácteos, estas patologías no existían.
Y curiosamente Yoplait en USA (una marca de yogures), financia las carreras del lacito rosa…raro, raro, raro…
Las vacas se inseminan cada año. Durante su embarazo producen estrógenos que terminan en la leche. Si esa leche se convierte en queso, la concentración de estrógenos se multiplica. Ese exceso es una de las causas principales del crecimiento y multiplicación de células cancerosas.
Curiosamente tanto la fertilidad de la mujer como la impotencia del hombre dependen sustancialmente del consumo de lácteos. Durante mi experiencia como mentora he comprobado que cuando abandonas los lácteo suceden cosas maravillosas en el cuerpo. El caso mas increíble fue el de una mujer de 51 años que volvió a menstruar después de 7 años. No me lo podía creer!.
Dejar de tomar lácteos equivale entre otras cosas a reducir la grasa, y comenzar a equilibrar tu sistema hormonal por lo puede ser de las mejores decisiones que tomes en tu vida.
Bibliografía:
The Inmune system Recovery Plan, Susan Blum.
Your Body in Balance, Neal D. Barnard.
La enzima prodigiosa, Hiromi Shinya
El libro de la detoxificación milagro, robert Morse.